Adrián ha estado enfermo gran parte de su vida.
Sabe lo que es morir. Y volver a nacer.
Adrián conoce la sensación de que se le pare el corazón. Y después, de que este vuelva a latir.
Para lo que Adrián no está preparado es para lo que trae consigo su nuevo corazón; y es que tras el trasplante que le regala una segunda oportunidad, Adrián comienza a experimentar una vida que no parece la suya, con unos recuerdos que no le pertenecen, una forma de ser distinta a la que tenía… y un amor hacia una chica que jura no conocer.
¿Puede la muerte acabar con el amor o es después de la muerte cuando el corazón empieza a latir?
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